Sin ánimo de echar las campanas al vuelo, lo visto ayer en Mestalla, campo donde hay que poner las cartas sobre la mesa, da pie a tener ilusión y esperanza para retomar nuestra senda. Se apreció sello, empaque y mejor actitud sobre el campo. Falto como de constumbre la puntería de los delanteros, pero en el lado positivo se apreció más llegada y definición de la segunda línea.

Valiosísima victoria de 6 puntos que comprime aún más la clasificación de la otra Liga, y la separa escandalosamente de la otra, la de los dos mantodontes aprovechados de la Liga, que encima se quejan cuando el colectivo arbitral favorece a uno más que a otro.

Ahora llega el Atlético de Madrid, sólo cabe la victoria, esto es lo que hay. Ojalá que en este partido renazca Negredo o Kanouté, o Baba.
El apoyo de la afición no faltará…