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13/01/2016

La crónica de Rafael Rodríguez

Por muchas rejas que se quieran poner para intentar mitigar diferencias de estilo, orígenes y éxitos, así como complejos de inferioridad, la Verdad Rojiblanca sale siempre a la luz en esta Bendita y Mariana Ciudad.
Por mucho que se quiera repetir una y otra vez, en un bucle infantil y estéril, una discretita pieza musical para querer soliviantar a unos Valientes, nuestro Himno, La Composición de Composiciones, sonará con toda su bravura y belleza desde miles de gargantas, espontáneamente, desde el alma rojiblanca, esta vez en un bucle de felicidad, sorna y hombría, y desde la Victoria.

Victoria más allá de lo deportivo. Victoria en el estilo. Victoria en el humor y en los medios empleados. Victoria incluso con respecto a la sed de venganza que pedía el lado oscuro de cada uno de nosotros. Victoria en no querer hacer sangre en el terreno de juego. Por eso, esta eliminatoria, además de superarla sin despeinarnos (6-0 en el total), ha mostrado Nuestra Grandeza, en lo deportivo y en lo no deportivo.
La Grandeza se tiene o no se tiene, no se puede imitar, no se puede aprender, pues tarde o temprano, a base de mal imitar, aparecen detalles, gestos, rejas, bucles, que te dejan nuevamente en evidencia, y te devuelven a tu auténtica dimensión . Y la Grandeza es Rojiblanca en esta ciudad.

Muchas ilusiones puestas en la copa del Rey, esperemos seguir progresando en esta competición, y dar por fin, el salto de calidad en liga. El italiano Inmobile no está ya en el equipo, quedan muchos partidos y podrían venir jugadores, porque hay muchas cosas que mejorar en lo deportivo. ¡Vamos hacia arriba, Sevilla!

¡Viva el Sevilla FC!¡ Viva la Peña Sevillista Nervión Solidario!¡Viva el Rey Baltasar!

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